10 Lecciones de emprendimiento en películas que no son de negocios II

por | 20 mayo, 2019

Películas post 2000

Hace algún tiempo escribí un blog llamado «10 Lecciones de Emprendimiento en películas que no son de negocios» que pese a los tres años que ya han pasado desde su publicación, siempre está recibiendo nuevas visitas en mi blog. En dicho artículo (debo reconocer) utilicé como referencia varias de mis películas favoritas. Las cuales en su mayoría son de la década de los 80′ y 90′ y que por lo mismo, para toda una generación de nuevos emprendedores pueden resultar demasiado antiguas o desconocidas.

Es por eso que ahora les propongo otras 10 lecciones de emprendimiento en películas que no son de negocio, pero todas posteriores al 2000. Es decir, aptas para millennials.

nemo

  1. Buscando a Nemo (2003) Directores: Andrew Stanton & Lee Unkrich. Tu origen no determina tu destino. Nemo es un pequeño pez payaso, el único hijo que le quedó a Merlín después de que una barracuda atacara la anémona donde vivía en el arrecife y acabara con su pareja y con sus demás hijos. Esa desgracia, además del hecho que Nemo naciera con una aleta atrofiada determinó que su padre lo criara de forma extraordinariamente sobreprotectora. Nemo nunca aceptó que dichas limitaciones le impidieran demostrarse a sí mismo (y a su padre) de lo que era capaz. Nemo es capturado por un buzo al alejarse del arrecife y al momento de planificar su huida pudo demostrar su tremenda valentía y determinación. Lo mismo para emprender. Tus características, capacidades y condiciones originales no pueden, ni deben ser una limitante para llegar a ser quien quieres ser.
  2. Antes del Atardecer (2004) Director: Richard Linklater. La vida siempre te ofrece segundas oportunidades.  Luego de que Jesse y Celine se separaran nueve años antes en la estación de trenes de Viena sin volver a saber nunca más el uno del otro (esto fue antes de las redes sociales) se encuentran nuevamente de forma semi-casual en Paris y deciden pasar una tarde juntos para darse la chance de retomar el romance iniciado hace casi una década. Es verdad, a veces las cosas pueden salir mal. Justo el día que te ibas a encontrar con la persona que puede ser el amor de tu vida, tu abuela fallece y no puedes ir. Pero siempre habrá una segunda oportunidad para partir de nuevo. Nunca la desaproveches.
  3. Zoolander (2001) Director: Ben Stiller. Los éxitos del pasado no te garantizan los del futuro.  Derek Zoolander es un supermodelo de talla mundial. Ha construido su fama sobre la base de su intensa mirada y diversas posturas ante las cámaras. Las cuales, francamente, son todas iguales. Eso le permitió estar siempre en el primer lugar de su categoría, hasta…Hasta que se acaba no más cuando surge Hansel (otro modelo desopilante interpretado por Owen Wilson) que le arrebata la que podría haber sido su cuarta corona como el mejor del mundo. Los mercados y las audiencias siempre están cambiando. Un producto, por bueno que sea, no funciona para siempre.
  4. Mamma Mia (2008) Directora: Phyllida Loyd. Para vender cualquier producto, no hay mejor forma que provocar en torno a él, la emoción de la nostalgia. La lección aquí no está dada por la trama del film, sino por la película en si misma. Mamma Mia no tiene un gran guión, tampoco grandes actuaciones y mucho menos, grandes cantantes. Pero fue un exitazo a nivel global. ¿Cómo? Con una historia sencilla acompañada de las mejores canciones de uno de los grupos musicales más populares de los 70′. Canciones que están grabadas en la biografía de todos aquellos que acudieron verla. La nostalgia es la emoción más eficiente a la hora de vender un producto o un relato, ya que al sentirla se bloquea inmediatamente la capacidad de ver o percibir algo negativo. Provoca en tu audiencia la nostalgia y tendrás el 80% de la venta hecha.
  5. Match Point (2005) Director: Woody Allen: Más vale tener suerte que talento. Quizás no se debiera poner esta idea en absoluto, pero tampoco podemos desconocer que para emprender la suerte es un elemento que debes invocar en tu favor. Chris Wilton es un ex tenista profesional que comete un asesinato para encubrir una relación extra matrimonial que mantenía con el personaje interpretado por Scarlett Johanson (¿quién podría juzgarlo?). Al momento de deshacerse de la evidencia del crimen y con la finalidad de hacer parecer éste como el resultado de un robo, lanza una serie de joyas al río. Pero un anillo golpea la baranda peatonal y al igual que una pelota de tenis cuando topa la cinta de la red, el anillo se debate entre caer de un lado u otro. Finalmente cae del lado de la calle, lo que le permite ser encontrado por un vagabundo, quien posteriormente es hallado muerto, atribuyéndosele entonces a éste, la autoría del crimen y librando a Chris de las sospechas que ya caían sobre él. Ya sabemos, para emprender, además de todo el trabajo de diseño, validación y venta, también vas a requerir de suerte.
  6. El Discurso del Rey (2010) Director: Tom Hooper. Tu mejor socio es quien te aporta en lo que tu careces. El Rey George VI posee un evidente impedimento del habla. En plena Segunda Mundial su pueblo requería de un liderazgo que difícilmente se podía transmitir entremedio de un permanente tartamudeo. Pero el Rey conoce a Lionel, un especialista autodidacta en este tipo de trastornos, quien, mediante técnicas poco convencionales le ayuda a dar un emotivo discurso de aliento a su pueblo y a sus tropas. Para emprender, tener un buen socio es fundamental. Elige a aquel que no solo haga bien aquello que tú no haces, sino que también te aporte a potenciar tus propias capacidades.
  7. Pequeña Miss Sunshine (2006) Directores: Valerie Faris & Jonatha Dayton. Nunca temas ser completamente distinto al resto. La pequeña Olive de siete años sueña con participar de esos típicos concurso de belleza y talento que se realizan en los EE.UU. El tema es que, por muy simpática que era la niña, la verdad que belleza (al menos en lo convencional y requerido para este tipo de concursos) no tenía y talento, pocazo. Pero con la ayuda de su abuelo (un genial Alan Arkin) prepara una rutina de baile completamente inapropiada y fuera de lugar, que le ocasiona la prohibición para siempre de participar en este tipo de eventos. Olive fue completamente distinta a todas. Quizás no ganó ese concurso, pero llamó la atención de todos los asistentes, construyendo una marca que será, hacia el futuro, imposible de imitar.
  8. Como si fuera la primera vez (50 primeras citas) (2004) Director: Peter Segal. Si empatizas con él, hasta el cliente más difícil puede llegar a conquistarse. El personaje de Drew Barrymore sufre de amnesia de corto plazo. Es decir, le resulta imposible recordar su día anterior. Adam Sandler se enamora de ella y sabe que tiene solo 24 horas para conquistarla cada día. Pues lo hace. Diseña toda una compleja estructura de videos y con la ayuda de la familia de ella es capaz de transmitirle toda la seguridad y confianza que puede llegar a necesitar alguien que despierta cada día al lado de un desconocido. Siempre habrá audiencias o clientes difíciles, pero para conquistarlos, debes ver el problema desde su perspectiva, no desde la tuya. Ahí estará el origen de su solución.
  9. The Avengers (2012) Director: Joss Whedon. Emprender es un trabajo colaborativo.  El éxito de los proyectos de nuevos negocios está determinado hoy en día, en gran medida, por las capacidades de interacción del emprendedor con su entorno (socios, colaboradores y redes de apoyo) más que por sus capacidades propias. En estos tiempos ni Iron Man, ni el Capitán América son suficientes por si solos, para librar a la humanidad de todas las amenazas que le acechan. Hoy se requiere de todos los superhéroes trabajando en conjunto, cada uno desde su propias capacidades y habilidades y aportando entre todos para un fin común. Para emprender es lo mismo. Da lo mejor de ti y aprovecha lo mejor de los otros. El mundo del Llanero Solitario ya quedó atrás hace mucho tiempo.
  10. La Tormenta Perfecta (2000) Director: Wolfang Petersen. Escucha las señales y aléjate del voluntarismo. Los pescadores a bordo del Andrea Gail salen de las costas de Nueva Inglaterra a la captura de pez espada. Al poco andar, todo indica que el tiempo iba a cambiar y que se aproximaba una gran tormenta. Era el momento de decidir si regresaban o seguían adelante con la pesca, poniendo en riesgo las vidas de todos. Optaron por lo segundo. Las señales estaban claras. La tormenta iba a llegar. Era un hecho. Pero el voluntarismo emprendedor (esa idea de que las cosas se van a dar a mi favor, solo porque yo quiero que sea así) los hizo seguir adelante contra todo razonamiento lógico. El resultado: todos murieron. Que no te pase. Si las señales de fracaso están golpeando la puerta, toma el dinero y los otros recursos que te van quedando y…¡a intentarlo de nuevo!

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